Con motivo del Día Mundial de la Infancia, el jueves 20 de noviembre los niños, niñas y adolescentes del Casal dels Infants Besòs-La Mina salieron a la calle, junto con otras entidades y la comunidad infantil del barrio de La Mina, para hacer una rúa con farolillos y alzar su voz a favor de los derechos de todos los niños y niñas.

Niños, niñas, jóvenes y familias se concentraron delante del local del Casal en la Rambla de La Mina para caminar hasta el edificio Venus, con farolillos creados por los propios niños y niñas con la ayuda de las familias, que iluminaban su camino. La luz de cada farolillo simbolizaba cómo pequeñas luces pueden formar una muy grande, del mismo modo que la comunidad se agrupa en defensa de los derechos de los niños y niñas.

Delante del edificio Venus, los portavoces escogidos entre los niños y adolescentes de las entidades participantes —Fundació Pere Closa, Associació Casal Infantil La Mina, La Capsa dels Jocs, Fem Família, PES La Mina y el Casal dels Infants— leyeron el manifiesto que ellos y ellas mismas habían escrito para el 20N.

Reclamaron espacios verdes, parques infantiles y calles en buen estado en el barrio, haciendo referencia al derecho al juego, tal como está recogido en la Convención sobre los Derechos del Niño. También reivindicaron el derecho a “ser escuchados, a jugar y a aprender en paz” y a crecer “con oportunidades y respeto”.

“Así es como queremos crecer, y así es como queremos que crezcan todos los niños y niñas del mundo”, afirmaron los niños y niñas de la Fundació Pere Closa. “Nuestros derechos no son un regalo, son una necesidad”, sentenciaron los y las portavoces del Casal.

1 de cada 3 niños en situación de riesgo de pobreza o exclusión social en Catalunya

Alzar la voz para defender los derechos de la infancia sigue siendo muy necesario. En Catalunya, 467.000 niños y niñas, 1 de cada 3, viven en riesgo de pobreza o exclusión social, según la Encuesta de Condiciones de Vida de 2024. Son 25.000 más que en 2023.

La infancia es la franja de edad que más sufre esta situación, y con los años se ha cronificado. En la última década, la proporción de niños y niñas afectados se ha mantenido por encima del 30%, excepto en 2016.

Esencialmente, el 20N es un día para recordar a escala mundial la importancia de proteger y promover los derechos de la infancia, para exigir a gobiernos y organizaciones su compromiso de velar por el bienestar de los niños y niñas mediante políticas y leyes, para educar a las personas, tanto jóvenes como adultas, sobre los derechos de la infancia, y para empoderar a los niños y niñas.